Cada vez más personas adquieren un vehículo eléctrico (VE) y las estadísticas indican que el número de este tipo de coches se duplica cada año en las carreteras suecas.

La familia Nordin es propietaria de un VE desde hace poco: en diciembre les entregaron su nuevo Volvo XC40 Pure Electric. Si se tiene un vehículo 100 % eléctrico, es prácticamente indispensable contar con un punto de recarga, por eso David Nordin se puso a buscar el modelo óptimo para la casa y el coche.

«Es cierto que, al principio, estuvimos barajando unos cuantos proveedores, pero al final no tuvimos ninguna duda de que nos quedaríamos con un cargador de Charge Amps», explica.

Muchos expertos opinan que el vehículo eléctrico ha llegado para quedarse; al mismo tiempo, se están llevando a cabo esfuerzos firmes encaminados a reducir el uso de combustibles fósiles. La familia Nordin ya llevaba un tiempo sopesando adquirir un vehículo eléctrico y, a finales del año pasado, decidieron que había llegado el momento de dar el paso.

«He tenido un híbrido, pero antes siempre había tenido gasolina. Sin embargo, el coche eléctrico ofrece numerosos atractivos, como una gran comodidad y una conducción agradable; además, poder conducir sin hacer ruido me parece moderno y acorde con los tiempos», afirma.

Un diseño atractivo y buen rendimiento

No obstante, en comparación con un híbrido, se recomienda vivamente adquirir un punto de recarga para el vehículo eléctrico. Un cable de carga enchufado en una toma eléctrica normal puede resultar muy inseguro; aparte de que, según Volvo, se pueden necesitar casi 30 horas para alcanzar la capacidad de carga completa. Por eso, la familia Nordin no tuvo ninguna duda de que se compraría un cargador, la única cuestión era dónde lo adquirirían.

«La verdad es que hay muchas empresas entre las que elegir. Pero a través de un conocido supimos de Charge Amps y nos encantó que tuviera un diseño atractivo y un cable que resistía perfectamente el frío. El rendimiento del cargador era buenísimo, al igual que el precio y la funcionalidad. Por eso elegimos Charge Amps y su punto de recarga Charge Amps Halo de 11 kW».

El punto de recarga Charge Amps Halo incorpora además una toma adicional en la parte inferior, de modo que la familia también puede cargar la bicicleta eléctrica. Tampoco se plantearon nunca que la factura de la luz podría subir mucho cada mes.

«Nuestra compañía eléctrica carga el coche cuando el precio de la electricidad es más bajo y durante un periodo largo; la recarga comienza por la noche y está finalizada por la mañana antes de que me vaya al trabajo. El mes pasado cargamos el coche por unas 35 coronas, y eso haciendo recargas diarias».

«Además, es facilísimo de utilizar: solo hay que enchufar el cable. Y opcionalmente se puede comprar el Amp Guard, que optimiza la carga en relación con los demás consumos de la casa. A veces están puestos el lavavajillas, la lavadora y la secadora al mismo tiempo, en ese caso se reduce la corriente automáticamente hasta que han terminado todos los electrodomésticos. Así evitamos las sobrecargas de la red y que salten los fusibles», declara David.

Un proceso sin complicaciones

Tras haber recibido respuesta a sus preguntas y dudas, David encargó un Charge Amps Halo que le enviaron a la puerta de su casa por mensajería. Después la familia contactó con un electricista profesional para realizar la instalación. Gracias a que el cargador ya se había instalado en noviembre, cuando les entregaron el coche no tuvieron más que subirse y arrancar.

«Todo el proceso fue increíblemente fácil. Los cables eléctricos ya estaban tendidos, así que no hizo falta más de una hora para que la instalación estuviera lista y en funcionamiento. Cuando recibimos la factura, fuimos a la Agencia sueca de Protección del Medio Ambiente para solicitar la deducción fiscal por tecnologías verdes a la que teníamos derecho y que cubre el 50 por ciento del coste. Tardamos cinco minutos en presentar la solicitud y, una semana después, ya teníamos el dinero ingresado en la cuenta. No tuvimos ninguno de los quebraderos de cabeza clásicos que te podrías esperar. A partir de 2021, el propio instalador se encarga de gestionar esta deducción, así que ya ni siquiera tienes que presentar tú la solicitud».

«Estoy contentísimo con la compra y jamás me hubiera planteado tener un coche eléctrico sin comprar un cargador. Es verdad que me hubiera podido pasar varias horas cada día cargando fuera de un McDonald’s con puntos de recarga, pero para la salud hubiera sido un desastre», concluye riendo.